Te comprendemos y es necesario contarte que el ronquido es el sonido que emitimos cuando el aire pasa por una zona estrecha de las vías aéreas superiores. Aunque es relativamente frecuente no debemos considerarlo como algo normal.
La mayoría de las veces en la que ocurren ronquidos en un niño suele ser por presencia de algún cuadro de gripe. En estos casos no indican ningún riesgo, porque en cuanto cure su gripe dejará de roncar. Sin embargo, más allá de la gripe debes tener en cuenta lo siguiente:
Las causas comunes para que ocurran ronquidos en niños son:
- Infecciones respiratorias
- Rinitis alérgica
- Reflujo gastroesofágico
- Fumadores pasivos
- Niños con adenoides más grandes de lo normal.
El ronquido en los niños se ha vuelto cada vez más común y los padres y médicos no le prestan mucha importancia. El ronquido sólo se vuelve una preocupación cuando el niño deja de respirar o cuando hay otros trastornos del sueño. Si tu hijo ronca constantemente es una señal de que ocurre algún problema mayor.
El ronquido constante nunca debe ocurrir en niños, especialmente en los que no presentan obesidad o adenoides grandes, ya que son factores de riesgo para presentar episodios de pausas respiratorias conocidas como apnea.
¿Es un problema que mi hijo ronque?
El ronquido afecta de gran manera el sueño de tu hijo porque éste se ve fragmentado y no es reparador como lo necesita su cuerpo. Los niños que roncan tienen con más frecuencia terrores nocturnos y pesadillas.
Si tu hijo ronca, observa si presenta pausas para “retomar» la respiración en repetidas veces pues de ser así estaría presentando el síndrome de apnea del sueño.
Este síndrome es más grave que un simple ronquido pudiendo ocasionarle bajo rendimiento escolar, mala conducta hasta déficit de atención.
En la actualidad se sabe que los trastornos respiratorios del sueño y los ronquidos constantes tienen consecuencias negativas y provocan alteraciones en el organismo de tu hijo
Las consecuencias son:
- Riesgo de sufrir hipertensión arterial
- Déficit de atención
- Déficit de aprendizaje
- Excesiva somnolencia por las mañanas
- Retraso de crecimiento
- Hiperactividad
Si has notado que tu hijo ronca todas las noches y además se levanta de mal humor, presentando ojeras notorias, no dudes y pon a tu hijo en manos de un especialista del sueño para que realice el diagnóstico adecuado y el tratamiento temprano que él necesita.